
MAYO: NO DESISTAS MAGISTERIO
POR: Blanca F. Góngora
Hoy es el día del estudiante, felicito a mis estudiantes actuales y a los que he tenido a lo largo de los años, reconozco que mi vida de estudiante fue maravillosa y mis recuerdos de grandes maestros siguen intactos y entre más experiencia tengo como docente más cruel se me hace el odio que de pronto recibe esta bella profesión.
Mayo es un mes de mucha crítica en contra de los trabajadores de la educación; las ofensas no faltan en redes sociales y se les dice flojos por las suspensiones de clases que este mes contempla mismas que no dependen del maestro, pues los maestros no deciden que esto sea así, ni la dirección escolar, ni la escuela misma; esto es una decisión unilateral como muchas de las que toma el gobierno; para muestra “la semana extra de vacaciones del ciclo escolar para que descansen lo maestros” que acaba de anunciar Claudia Sheinbaum y que por cierto, el magisterio nunca pidió. Ahora sí que lo que exigen ni les resuelven y lo que ni piden se los dan.
Los “puentes” tampoco son culpa de los maestros y de hecho, aunque se les disfrace con intención de aprendizaje y reflexión sobre dicha fecha, el motivo real es el económico y no el pedagógico; tampoco es para que los maestros descansen, no fueron creados con ese fin, si realmente se quisiera que los docentes tuvieran mejores condiciones laborales tendrían salones de clases y escuelas bien habilitadas, grupos menos numerosos, aires acondicionados, internet, agua, materiales didácticos, bibliotecas, plantillas de personal completo en las escuelas, etc.; pero no, la gran deuda con la educación y con el magisterio sigue, en eso no ha cambiado nada.
Que si celebra el día del trabajo, el día de la batalla de Puebla, el día de las madres, el día del maestro, el día del estudiante, no lo ha decidido el magisterio; de hecho el magisterio trabaja mucho más (y gasta mucho más dinero y esfuerzo) cuando tiene que preparar festivales y ceremonias, pues tiene que adaptar sus planeaciones de clases para lograr avanzar y poner en sintonía a sus estudiantes ya que cuando hay suspensión, los alumnos se muestran más apáticos y con desgano cuando regresan a clases.
Es mayo sí, mes del maestro, mes del estudiante, mes para hacer conciencia sobre las carencias que hay en las escuelas, para invitar a la reflexión sobre lo mucho que nos falta para estar al nivel de otros países muy prestigiados por el tema de la educación. Mes para que se visibilice la profesión docente, la cual se torna cada vez más difícil pues además de mal pagada, los niños, niñas y adolescentes que forman la matrícula de educación básica muestran cada vez más conductas disruptivas y de poco respeto hacia sus compañeros y hacia los trabajadores de la educación que los atiende. Es mayo, sí, momento exacto para decir: no desistas magisterio, la razón te asiste y la justicia te debe llegar.
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A partir del Lunes 11 de Abril de 2011
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