
*“Lo más triste es que nosotros les damos esa información, somos nosotros quien les damos acceso a los datos, por eso siempre hay que estar alerta y atentos a los mensajes que recibimos y cuidar lo que subimos a internet”: Pedro Santana, académico
Llamadas desde Reino Unido, Ucrania, mensajes o llamadas para recoger un paquete e incluso aquellas llamadas de supuestos bancos que alertan sobre robos o compras con tarjeta, son las más recientes formas de estafa y robo de datos personales. Pero ¿cómo ocurren estos robos?, ¿cómo acceden a datos personales? Sobre estas dudas entrevistamos al doctor Pedro Santana Mancilla, quien compartió algunas estrategias para proteger datos personales.
Pedro César Santana es profesor-investigador de tiempo completo en la Facultad de Telemática de la Universidad de Colima, México. Es experto en áreas como la Interacción Humano-Computadora (HCI), Ingeniería de Software, Tecnologías para el Aprendizaje, Cómputo Ubicuo e Inteligencia Ambiental.
Ha sido reconocido con el IBM Faculty Award en 2012 por su investigación en “Inteligencia Ambiental e Interacción Natural en el Aula”. Entre sus proyectos destacan sistemas de Internet de las Cosas (IoT) para monitoreo remoto de la salud, plataformas para mejorar la comunicación de personas mayores, y el uso de interfaces tangibles para la enseñanza de niños con necesidades especiales.
Todo aquel que tenga acceso internet, comentó el investigador en entrevista, puede ser blanco de fraude, robo o estafa; sin embargo, unos son más vulnerables debido al desconocimiento de cómo funcionan las redes, páginas o por algún descuido involuntario. “Les pueden robar información e incluso robar la identidad”, alertó.
Quienes cometen estos robos, continuó, “son redes de delincuentes e incluso granjas de bots. Antes eran muchos celulares conectados a internet, pero ahora son equipos de computadoras en las que se conectan a una tarjeta de celular, y desde esa máquina se pueden simular muchos números de teléfono y enviar mensajes por WhatsApp, directos o hacer llamadas”.
Un ejemplo de cómo operan estas granjas de bots, es el envío de mensajes directos al WhatsApp o una llamada y nadie responde: “Es muy importante no abrir esos vínculos y no responder nada en esas llamadas, porque podrían clonar nuestra voz. El bot llama, se da cuenta de que es una persona y la selecciona como blanco de estafa, entonces ya mandan mensajes con links para que los abra o para clonar la voz”, detalló.
Es importante, continuó, “no contestar números que no conocemos, no regresar la llamada a esos números y bloquearlos; si estoy esperando una llamada, que quien llame sea el primero en hablar; en el caso de recibir llamadas diciendo que es un familiar, debemos colgar automáticamente y tratar de localizarlo, ya sea en físico o pedirle a alguien que corrobore que está bien”.
Otro tipo de estafas es el robo del número de celular. “Aquí, los delincuentes piden que se entre nuevamente al vínculo, llaman para que se les dé alguna clave y una vez que acceden a la cuenta de WhatsApp, por ejemplo, escriben a contactos personales haciéndose pasar por uno para pedirles dinero. Puede ser una persona o un bot”, agregó.
Lo que se recomienda en estos casos, dijo Pedro Santana, “es activar la verificación de dos pasos; de esta manera, nadie podrá activar un número en otro celular si no tiene esa verificación, que es un número, una clave adicional que se tiene que introducir para poder utilizar el número personal”.
¿Cómo cuidar nuestros datos personales?
El cuidado de los datos personales, advirtió el investigador, “es un tema complejo, ya que todo el tiempo, como usuarios de plataformas de internet, proporcionamos información como nombre, domicilio, número de celular. En las aplicaciones usamos el lugar donde nos encontramos y esa información se envía a los servidores de las empresas. Digamos que nosotros mismos alimentamos las bases de datos que se encuentran en línea”.
¿Qué sí se puede hacer?
“Evitar subir a redes sociales fotos que puedan identificar dónde vivimos, dónde está la calle y el número de casa. Si se tienen hijos, nunca subir fotos de ellos con los uniformes escolares para que no sepan dónde estudian y no subir los lugares donde estamos en tiempo real, pues esto nos hace muy localizables. Tampoco debemos publicar las rutas por donde transitamos”, aconsejó.
“Hace unas algunas semanas se puso muy de moda hacer las imágenes al estilo Studio Ghibli (un estudio de animación japonés), las personas comenzaron a decir que no lo hicieran porque estaban dando su información, pero desafortunadamente esa información ya se la habían dado a otras plataformas cuando suben sus fotos de perfil. Entonces, sólo es estar conscientes de lo que subimos”, dijo.
También recomienda no dar información de nuestro domicilio ni subir credenciales de elector a páginas no reguladas: “Hay páginas que ofrecen préstamos sin revisar historial; es simple instalarlas y muchas veces no leemos los términos y condiciones y les damos aceptar, entonces nos pueden robar fotos de la galería y contactos. Estas páginas envían mensajes a nuestros contactos diciéndoles que les debemos, hay que tener mucho cuidado”, alertó.
Cuando se navegue en internet, continuó, “siempre hay que verificar que en la barra de direcciones esté un candadito en el lado izquierdo de la página, pues nos dice que la página es segura, de lo contrario no hay que proporcionar ninguna información, pero sobre todo hay que enseñar este tipo de estrategias a menores de edad y jóvenes para que sepan identificar cuáles son los posibles riesgos (hay muchos en Internet), porque son muy vulnerables”.
Por último, dijo que la Inteligencia Artificial se alimenta de información: “Lo más triste es que nosotros le damos esa información, somos nosotros quien les da acceso a los datos, por eso siempre hay que estar alerta y atentos a los mensajes que recibimos, leerlos muy bien, verificar si nuestra familia está bien y cuidar lo que subimos a internet”.
Total de Visitas 320047294
A partir del Lunes 11 de Abril de 2011
Desarrollada por HMH Sistemas
Template by OS Templates